Jade (Crassula ovata)

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La planta de jade o Crassula ovata es una suculenta altamente valorada por su bajo mantenimiento, que no requiere riegos frecuentes, ni cuidados especiales.Originaria de Mozambique y algunas otras provincias de Sudáfrica.

El Jade no solo es apreciado por su belleza y resistencia, sino también por su simbolismo. En muchas culturas,  especialmente en la tradición china, se considera que el Jade trae buena suerte, prosperidad y riqueza a quienes lo poseen. Se cree que tener una planta de jade en casa atrae energía positiva y oportunidades financieras.

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Luz

Se debe evitar la exposición a la luz solar directa, pero igual necesita mucha luminosidad para poder desarrollarse, si la planta no recibe suficiente luz, su crecimiento se ralentizará, las hojas pueden volverse más delgadas y la planta puede perder su color v. Sin embargo, demasiada luz solar directa, especialmente en las horas más fuertes del día (mediodía), puede quemar sus hojas, provocando manchas marrones o secas.

Riego

El Jade es una suculenta que almacena agua en sus hojas, por lo que no requiere riegos frecuentes. Riega la planta solo cuando la kokedama esté completamente seca, lo cual generalmente sucede cada dos semanas, dependiendo de la humedad ambiental. Evite el exceso de riego, ya que puede causar pudrición de raíces. Un buen método es sumergir la kokedama en agua durante 10 minutos y luego dejar que escurra completamente antes de devolverla a su lugar.

Humedad

La Crassula ovata prefiere ambientes secos o con humedad moderada, alrededor del 30-50%. No necesita un ambiente húmedo para crecer bien y tolera perfectamente el aire seco típico de interiores. No es necesario pulverizarla.

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